Entender el cambio climático no debería ser tan complicado

Nuestra historia comienza en 2019 con Eric e Issy, dos jóvenes científicos de la Universidad de Cambridge, que estaban preocupados por el cambio climático. Vieron que las cosas se estaban complicando — los incendios estaban arrasando el Amazonas, las olas de calor extremas se estaban sintiendo en toda Europa y las inundaciones estaban devastando grandes zonas de la India. Las voces preocupadas por el cambio climático eran cada vez más fuertes, y la gente comenzó a manifestarlo en la calle.

Como solucionadores naturales de problemas, Eric e Issy intentaron buscar soluciones. Buscaron, “Cómo resolver el cambio climático” en línea, pero no les aportó nada más que ansiedad climática y anuncios de productos ecológicos.

Al final, resultó que Eric e Issy no estaban solos: el 95% de los jóvenes está preocupado por el cambio climático y el 70% cuestiona la educación que reciben.

De pronto, dieron con una idea. Pensaron: "¿Y si creamos pequeñas dosis de información siguiendo los mismos estándares científicos que las revistas revisadas por pares, para así empoderar a las personas a resolver el cambio climático?"

Juntos, comenzaron a revisar artículos de ciencia climática y a transformarlos en contenido apto para redes sociales, todo bajo el nombre de ClimateScience. Después de dos cortos meses, ClimateScience se volvió viral y creció hasta los 40.000 seguidores en Instagram. La gente empezó a comunicarse por mensaje privado, preguntando cómo podrían ayudar. Un grupo de personas curiosas, amables y con mucho interés creció rápidamente, todos motivados a hacer que la educación climática fuera más comprensible para todos.

Solo unos años después, ¡ClimateScience ha crecido hasta convertirse en la plataforma de educación climática más grande del mundo! Creamos cursos, videos, recursos y materiales educativos para mejorar la comprensión y educación climática. Todo esto se hace de manera gratuita y a tan solo unos clicks de distancia en cualquier dispositivo.

La educación climática no es lo único que necesita mejorar, sino también nuestro sistema educativo. Necesitamos un mundo que recompense a la curiosidad, el pensamiento crítico, la exploración y el aprendizaje. Donde las personas puedan explorar sus pasiones y ser apoyadas para lograr sus metas.

Debido a la concientización superficial, hemos luchado contra el cambio climático usando solo una parte del potencial humano para resolver problemas. ¿Qué pasaría si utilizamos el resto? ¿Qué tal si creamos un mundo con menos sufrimiento y más oportunidades?

El viaje comienza aquí. ¡Únete al movimiento!